Podría haber sido un domingo cualquiera. Sin embargo no lo fue. Con el diario de lunes la fría estadística marca un poker de derrotas en todas las divisiones del Tricolor. Sin embargo, en una cancha cercana al club Regatas (No hay dudas que por lo lejos tranquilamente pertenece a otra localidad) un hecho histórico estaba a punto de pasar.
Con el resultado 12 a 0 abajo, los dirigidos por el Negro, Chispa y Tiky estaban en búsqueda del descuento, la defensa de los de Bell Vieu era muy férrea y parecía que los capitaneados por Panchito no encontraban la llave para rompèr el cerrojo. Todo parecía hasta que apareció él.
¿Es un pajaro?, ¿es un Avión? ¿Es Leguizamon?.No, es el Uruguayo. Si señores, el tipo de las camisetas achupinadas, iba a vivir su momento de gloria, y como buen wing, ante el mínimo espacio que tuvo facturó.
La jugada arrancó de un penal rápido en ataque, a pocos metros del ingoal. El pasamano lo encontró al último wing virgen, como el eslabón final de la cadena, y como si fuese Gonzalo Tiesi,
con la casaca 16, el baby de la Pre B se tiro en el ingoal y desató el delirio.
Los festejos de la gente eran más parecidos a los de los hinchas de River, después de la derrota de Boquita, que a un try que solo sirvió para darle una inmensa alegría, a los pocos que nos acercamos a la cancha 7 de Regatas.
El resto del partido es anecdótico. Un lindo try de Panchito, una buena pata en el traste de Nico a un rival y la aparente fractura de un dedo por parte del Sucio, son algunos de los momentos que dejo la fresca tarde del domingo.
Son varios los que a partir de ahora vana querer decir… “Yo lo descubrí al Uruguayo”. El merito de la dupla técnica no tiene limites. Con pocas herramientas y bastante zapienza lograron lo imposible. Siendo hoy 9 de junio, y tras dos años de mandato, lograron lo que pocos imaginaban que Rompo y el Uru marcaran tries de manera oficial. Ahora solo les queda hacer que el Pingüino recupere sus botines, algo sin dudas menos difícil que lo hasta aquí logrado.
Con el resultado 12 a 0 abajo, los dirigidos por el Negro, Chispa y Tiky estaban en búsqueda del descuento, la defensa de los de Bell Vieu era muy férrea y parecía que los capitaneados por Panchito no encontraban la llave para rompèr el cerrojo. Todo parecía hasta que apareció él.
¿Es un pajaro?, ¿es un Avión? ¿Es Leguizamon?.No, es el Uruguayo. Si señores, el tipo de las camisetas achupinadas, iba a vivir su momento de gloria, y como buen wing, ante el mínimo espacio que tuvo facturó.
La jugada arrancó de un penal rápido en ataque, a pocos metros del ingoal. El pasamano lo encontró al último wing virgen, como el eslabón final de la cadena, y como si fuese Gonzalo Tiesi,
con la casaca 16, el baby de la Pre B se tiro en el ingoal y desató el delirio.Los festejos de la gente eran más parecidos a los de los hinchas de River, después de la derrota de Boquita, que a un try que solo sirvió para darle una inmensa alegría, a los pocos que nos acercamos a la cancha 7 de Regatas.
El resto del partido es anecdótico. Un lindo try de Panchito, una buena pata en el traste de Nico a un rival y la aparente fractura de un dedo por parte del Sucio, son algunos de los momentos que dejo la fresca tarde del domingo.
Son varios los que a partir de ahora vana querer decir… “Yo lo descubrí al Uruguayo”. El merito de la dupla técnica no tiene limites. Con pocas herramientas y bastante zapienza lograron lo imposible. Siendo hoy 9 de junio, y tras dos años de mandato, lograron lo que pocos imaginaban que Rompo y el Uru marcaran tries de manera oficial. Ahora solo les queda hacer que el Pingüino recupere sus botines, algo sin dudas menos difícil que lo hasta aquí logrado.
